Capítulo 1: La junta de vecinos
Hay historias de navidad muy diferentes, esta es una historia de navidad muy especial que comienza la tarde del 23 de diciembre en una junta de vecinos de Mirador de Montepinar.
-Madre mía que aburrido es este hombre-dijo Izaskun-, el pescadero de los cojones.
-¡No digas eso!-dijo Mari Tere-, es el presidente.
-Ya pero a mí me da igual-dijo Izaskun.
-¡A ver si se pueden callar ya las viejas de atrás!-dijo Antonio-, como iba diciendo, esta navidad va a ser muy especial ya que, al estar yo al mando, quiero todo el edificio con luces y adornos.
-Si hombre-dijo Lola-, y un ángel de verdad en la entrada, no te jode jejeje.
-¡Si es necesario le bajaré del cielo!-dijo Antonio-, volviendo a lo que decía. He comprado todos los adornos y todas las luces para decorar todo el edificio. A las diez de la noche del día de mañana, todos los vecinos cenaremos juntos en el portal para celebrar la nochebuena.
-Si, si, eso es muy bonito, pero, ¿cuándo han costado las luces y los adornos?-dijo Goya.
-Poco, muy poco-dijo Antonio.
-¿Pero cuánto?-dijo Amador-, aunque a nosotros nos sobra.
-¡Muertos de hambre!-dijo Goya.
-¡Vieja asquerosa!-dijo Maite.
-¡Cállense todos o absuelvo la junta!-dijo Antonio-, ha sido barato, solamente 600 €.
-¡¿600 €?!-dijeron todos.
-Menuda barbaridad-dijo Enrique-, 600 € unos adornos.
-No-dijo Antonio-, 600 € por vecino.
-¡¿Cómo?!-dijeron todos.
-Sí, es Navidad y hay que gastar que lo dicen en todas partes-dijo Antonio-, a lo que iba. Los adornos han costado una pasta. Los he guardado en una de las habitaciones de los almacenes de todos los propietarios. Pero necesito que alguien los vigile y luego los coloque mañana. ¿Algún voluntario?... Como me suponía que nadie levantaría la mano, tengo preparado hacerlo por sorteo… ¡Izaskun y Mari Tere!
-¡No jodas!-dijo Izaskun.
-¡Qué bonito!-dijo Mari Tere.
-Ya se ha acabado la junta-dijo Antonio-, ¡a tomar por culo todos!
La noche cae sobre Mirador de Montepinar. Izaskun y Mari Tere vigilan los adornos con un sofá en el pasillo de los almacenes.
-Izaskun te estás durmiendo-dijo Mari Tere.
-Eso es mentira-dijo Izaskun-, si estoy viendo la película.
-¿Qué película? Si yo estoy haciendo punto de cruz y no hay tele-dijo Mari Tere.
-¡Qué sueño!-dijo Izaskun-, tenemos que aguantar toda la noche despiertas para que nadie robe la mierda de los adornos.
-Es duro pero hay que aguantar-dijo Mari Tere.
En ese momento las dos fueron cerrando los ojos lentamente hasta quedarse dormidas. Alguien entró en ese momento en los almacenes.
Capítulo 2: El robo
Amanecía la mañana del día de Nochebuena. Mari Tere se despertaba lentamente:
-¡Mierda!-dijo Mari Tere-, ¡Izaskun nos hemos dormido!
-Yo lo he intentado-dijo Izaskun-, porque con tus ronquidos no hay quien duerma.
-Voy a ver si están los adornos de navidad-dijo Mari Tere-, ¡mierda los han robado!
-¡¿Qué?!-dijo Izaskun-, los vecinos nos matan.
-Estamos acabadas-dijo Izaskun.
-Aún no-dijo Maxi.
-¡Joder qué susto Maxi!-dijo Mari Tere.
-Con esa cara es normal hija-dijo Izaskun.
-Aún no está todo perdido-dijo Maxi-, yo os puedo ayudar.
-Es imposible-dijo Mari Tere-, tenemos que adornar todo el edificio antes de las diez de la noche y no tenemos nada.
-Pero en los centros comerciales si hay-dijo Maxi.
-¿Qué estás proponiendo?-dijo Izaskun.
-Vamos en vuestro coche-dijo Maxi-, os lo contaré por el camino.
Los tres se dirigieron al garaje intentando no juntarse con ningún vecino y se dirigieron a un centro comercial.
-¿Hacer qué?-dijo Izaskun-, ¿te has vuelto loco?
-Es sencillo-dijo Maxi-, yo con el coche en marcha, y vosotras sacáis todos los adornos que podáis.
-Es un delito-dijo Mari Tere.
-Más delito es haberme casado con Maxi-dijo Izaskun-, yo creo que lo podemos hacer, lo estoy viendo desde otra manera.
-No vamos a poder con tantos adornos como los que había comprado el Rancio-dijo Mari Tere.
-Tranquilas-dijo Maxi-, hay muchos centros comerciales, lo haremos.
Los tres fueron al primer centro comercial y les salió bien. A las 15:00 salieron del séptimo centro comercial y se montaron en el coche.
-Este es el último-dijo Izaskun-, vámonos.
-¡Mierda la pasma!-dijo Maxi.
-¡Intenta esquivarlos!-dijo Mari Tere.
Maxi intentó huir de la policía, pero finalmente en medio de la carretera, la policía les alcanzó y les detuvo a los tres.
Capítulo 3: En comisaría
Eran las 18:00 y seguían en comisaría. La policía se había quedado con los adornos y ellos seguían detenidos.
-No teníamos que haber hecho caso-dijo Mari Tere-, no sé como puedes convencer a la gente.
-Yo creo que es hipnotizador-dijo Izaskun-, si no, no entiendo cómo me casé con él.
-¡Cállense!-dijo el policía-, van a ir a prisión.
-¡Ay dios mío!-dijo Mari Tere.
-Con una fianza de 20.000 € los tres-dijo el policía.
-Te has pasado macho-dijo Izaskun.
-¡Cállese!-dijo el policía-… un segundo… Me acaban de comunicar que, por sorpresa, alguien ya ha pagado su fianza.
-¿Dios?-dijo Mari Tere.
-No-dijo el policía-, una tal Araceli Madariaga. Pueden irse.
Los tres salieron, pero no encontraron a Araceli. Les parecía muy raro. Seguían sin los adornos por lo que decidieron ir al edificio y dar la cara, pero cuando fueron al coche encontraron otros adornos.
-¡Un milagro!-dijo Mari Tere.
-Tenemos que darnos prisa o no nos dará tiempo a colocarlos-dijo Izaskun.
Los tres volvieron a Mirador de Montepinar y colocaron todos los adornos. A las 22:00 los vecinos contemplaron el edificio con una sonrisa y se sentaron a comer juntos.
-Al final todo ha salido bien-dijo Mari Tere.
-La verdad es que sí-dijo Izaskun.
-¡Ey!-dijo Maxi-, ¡ya se quién robó los adornos!
-¿Quién?-dijo Izaskun.
-Fue Araceli-dijo Maxi-, he encontrado un trozo de su chaqueta en el lugar donde se guardaron los adornos.
-Tenemos que averiguar por qué lo hizo-dijo Izaskun.
Todos los vecinos cenaron juntos mientras Izaskun, Mari Tere y Maxi pensaban en encontrar pronto a Araceli y poder averiguar por qué hizo aquello.
viernes, 12 de diciembre de 2014
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